jueves, 2 de abril de 2015

ROMANCE SUCESO EN BADAJOZ

Pongan atención, señores
este caso sucedió
a un padre muy rico
muy cerca de Badajoz

Este padre,tenÍa una hija
que Soledad se llamaba
de unos diecinueve años
era muy buena cristiana

Un día dice a su padre
quiero hablarte dos palabras
ayer un muchacho del pueblo
me acompañó asta casa

Me ha pedido relaciones
es un pobre jornalero
pero eso a mí no me importa
tú, tampoco tienes dinero

El padre dijo a su hija
eso a tí, no te conviene
pues a lo mejor lo que busca
es solamente tus bienes

Tú debes de despreciarlo
pues yo te he de buscar
uno de tu condición
que tenga, igual capital

¿Maldito sea el dinero?
la hija le contestó
si no me das tu permiso
le daré mi corazón

El padre dice a su hija
si te marchas, de esta casa
para unirte con un pobre
te dejo desheredada

Sin pensarlo ni un momento
la chica de allí salió
se fue en busca del muchacho
y todo se lo contó

No te preocupes, mi cielo
yo no quiero capital
solo quiero, que me quieras
y quererte yo a ti, igual

Vente conmigo a mi casa
y viviremos felices
con mi trabajo tendrás
todo lo que necesites

Ha pasado algún tiempo
y embarazada quedó
y a la casa de su padre
marcha a pedirle perdón

Padre, pronto seré madre
solo te pido un favor
que cuando nazca mi hijo
que le des tu protección

El padre dice a su hija
vete, de aquí de esta casa
el dinero que yo tengo
no es para él, desgraciada

Llorando la pobre hija
de aquella casa salió
y aquella misma noche
que a luz, un niño dió

Pero Soledad, murió
abrazada a su marido
con dos lágrimas en los ojos
y que besando a su hijo

Pronto llegó la noticia
a casa de aquel mal padre
de la muerte de su hija
que murió sin perdonarle

Corrió como un desesperado
y cuando muerta la vio
de rodillas en el suelo
ante ella se postró

Quiero que venga la muerte
quiero quedarme ciego
soy un hombre sin piedad
por la ambición del dinero

Y cogiendo la criatura
como un loco la besaba
mientras le pedía perdón
a su yerno, que lloraba

Desde hoy en adelante
todo el capital que tengo
será para esta criatura
pues para mí, no lo quiero

Yo, he visto que el dinero
no da, la felicidad
que valía más mi hija
que todo mi capital

Ya ven ustedes señores
este caso que ocurrió
a un padre muy rico
muy cerca de Badajoz





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