En la provincia de Sevilla
en un pueblo muy nombrado
se llama Lora del Río
ya verán lo que ha pasado
Vivía un matrimonio
con bastante capital
de todo el mundo admirados
y una hija nada más
Pero quiso la desgracia
que esta felicidad
se convirtiera en amargura
y pena para este hogar
Porque la pobre mujer
de una enfermedad murió
y la hija con su padre
solos quedaron los dos
Ha pasado algún tiempo
y la joven ya tenía
diecinueve años de edad
y tranquila no vivía
Ella se daba cuenta
que su padre la miraba
y riendo le decía
cada día estas mas guapa
Un día el malvado padre
cegado por la ambición
sin pensar que era su hija
le declaró su intención
Hasta le dijo el infame
para ti todo mi capital
pero si no me haces caso
muy mal lo vas a pasar
Venderé todas mis fincas
y malgastaré el dinero
y entonces tendrás que ser
la mujer de un jornalero
Y la joven le contesta
a su padre infernal
desprecio todo el dinero
quiero ser pobre y honra
Un día que salio el padre
la joven se preparó
envuelta en un mantoncillo
al campo se retiró
Cuando ya vio que estaba
lejos de la población
una cuerda que llevaba
en un pino la amarró
Después se la echó al cuello
para quitarse la vida
no se dio cuenta la joven
de que alguien la veía
Un caballero que había
que perdices esperaba
al ver el echo de la joven
la vida se la salvaba
¿Qué te pasa linda joven?
¿te encuentras desesperada?
no tengo padre ni madre
y me siento abandonada
La subió en su caballo
y a su casa la llevó
a su madre y dos hermanas
todo se lo contó
La tomaron como hija
cuando vieron su bondad
la madre y las hermanas
cada vez la quieren mas
Y no fue menos el caballero
al verla tan buena y bella
pidió permiso a su madre
para casarse con ella
La boda se celebró
todo con mucha ilusión
y ahora verán el castigo
que al padre le mandó Dios
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Le mandó una enfermedad
que gastó todo el dinero
y ahora tenia que ir
vestido de pordiosero
Un día que la joven
en su puerta elle síntio
que allí pedía un pobre
una limosna por Dios
Salió la joven a darle
al pobre un trozo de pan
y tan pronto se retiró
la joven se echó a llorar
Y la suegra le pregunta
¿hija mía? ¿por qué lloras?
porque he acabado de darle
a mi padre una limosna
Lo llamaron corriendo
y todo se declaró
los hijos eran muy buenos
y lo perdonaron los dos
Al recibir la alegría
de sus hijos el perdón
le dio una calentura
y a los tres días murió
Ya ven ustedes señores
como Dios lo castigó
que viniera a pedir a su padre
una limosna por Dios
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